Reseña de "A dos centímetros de ti" de Elizabeth Eulberg

A dos centímetros de ti (Better off Friends) | Elizabeth Eulberg | Alfaguara | 2014 | 9788420417516 | 304 páginas | 14,50€

Digamos que Macallan y Levi fueron amigos a primera vista. Todo el mundo dice que los chicos y las chicas no pueden ser realmente amigos, pero ellos lo son. Y mucho. Quedan después del instituto, comparten miles de bromas privadas, sus familias están superunidas... Levi y Macallan solo son amigos, y están felices así.

Pero claro, los chicos no piden salir a Macallan porque piensan que está con Levi, y Levi pasa tanto tiempo con ella que casi no ve a sus novias. Así que un día comenzarán a preguntarse si no estarían mejor juntos. Aunque quizá eso lo complique demasiado todo...

¿Pueden los chicos y las chicas realmente ser amigos? ¿O están siempre a una pelea de no volverse a hablar nunca... o a un beso de encontrar el amor verdadero?

Llevaba mucho tiempo queriendo leer algo de esta autora y nunca encontraba en mi ciudad sus dos anteriores novelas, El club de los corazones solitarios o Del material que están hechos los sueños, así que cuando vi esta preciosidad en la librería, supe que tenía que ser mío y claro, me lo compré. Por fin podía leer algo de Elizabeth Eulberg y estaba muy emocionada, en serio. Y el libro no me decepcionó, me encantó e incluso lo leí rapidísimo porque es imposible soltarlo una vez lo empiezas. Y después de haber leído esta novela, estoy dispuesta a conseguir sus otros dos libros cueste lo que cueste.

A dos centímetros de ti nos cuenta la historia de Levi, un chico que acaba de mudarse a Wisconsin y de Macallan, una chica que acaba de pasar por una pérdida y que el director decide que muestre el colegio a Levi. Ambos tienen once años y aunque nunca lo hubieran imaginado, se hicieron amigos desde el primer momento, ya que tienen muchísimas cosas en común, entre ellas su programa de televisión favorito, con el que siempre están haciendo bromas y referencias. Su amistad va viento en popa, están siempre juntos y van creciendo juntos, ya que en el libro empiezan con 11 años y terminan con los 17. Los problemas empiezan cuando todo el mundo piensa que son más que amigos, Levi comienza a tener novia, llegan los primeros secretos cuando siempre se lo habían contado todo y eso hará que ellos se cuestionen muchas veces su amistad, ya que sienten mucha presión por lo que dicen siempre sobre ellos. Macallan y Levi tendrán que buscar una solución a sus sentimientos y a todo lo que les acontezca para que nada acabe con su bonita amistad.

Este libro me ha enamorado y encandilado. Me ha gustado mucho que los personajes hayan crecido durante el libro, que pase la historia durante años y no que sea durante un corto período de tiempo, ya que puedes ir viendo la evolución de ambos, como maduran y cambian, y sin duda esto hace que la lectura sea mucho más ligera. Otro punto muy bueno es que se van salteando los capítulos y uno lo cuenta Macallan y otro Levi, lo que nos ayuda a ver el punto de vista de ambos y eso es algo que verdaderamente me ha gustado. Y sin duda lo mejor son unas páginas grises que hay entre capítulo y capítulo en los que los actuales Levi y Macallan hablan y comentan lo que acaban de contar cada uno en el capítulo anterior, con unos diálogos muy amenos y divertidos, que te hacen ir pensando en como acaba el libro. El final es bastante previsible, pero aún así me gustó mucho y no me defraudó.

Me ha encantado como han tratado el tema de la amistad, sin duda creo que este libro es muy recomendable para personas de entre 12 a 16 años, porque se iban a sentir muy identificados, aunque a mi me ha encantado igual y tengo 21. La amistad es tratada con mucha delicadeza y nos transmite lo importante que es, nos enseña sus valores y eso es sin duda lo más importante que he sacado yo de esta novela. Y aunque también se habla de la familia y del amor, eso queda en un segundo plano, siendo la amistad lo prioritario. Y para poner la corona a la novela, los personajes estaban muy bien llevados, muy trabajados y con personalidades muy fuertes; y aunque ambos son diferentes, encajan genial. Sin duda todas las elecciones que hizo la autora han sido un éxito para mi. Elizabeth Eulberg tiene una pluma muy sencilla y llena de dulzura, y nos hace disfrutar de una novela fresca para estos días de verano, llena de valores y divertida.

La única pega para mi es el cambio de portada ¿Por qué? ¿Por qué? La portada me gusta (el amarillo es precioso, me encanta) pero comparada con la original parece un libro más bien infantil y me da rabia, porque no lo es. Por lo demás, genial.

En definitiva, una novela de lectura sencilla, rápida y fresca que te atrapará en su dulzura.